El consumo de televisión y video en dispositivos móviles y otras plataformas tecnológicas se ha incrementado en un 85% desde el año 2010, según un estudio de Ericsson, que además indica que el visionado de contenidos On demand creció 50% en los últimos seis años
Día a día la competencia entre la televisión tradicional, la tv paga y las nuevas plataformas de entretenimiento y streaming se hace más fuerte. Difusores tradicionales han defendido sus negocios de la creciente ola de servicios de transmisión. El camino más pesado recae en la parte que aparentemente tiene menos ventajas y es el Sistema Interactivo de Televisión (ITV), que no solo debe competir con sus iguales, sino con una gran mezcla de tecnología, inversión e innovación, al que en algunas ocasiones no logra igualar, pese a sus evidentes esfuerzos. Y es que ya no sorprende que el panorama de televisión y video esté dominado cada vez más por Facebook, Amazon Prime, Apple, Google y Netflix (Faang).
El último estudio de DeGroote Consulting, compañía experta en el negocio de medios, marketing e internet, indicó que el presupuesto para el ITV en este 2018, fue de $1.138.750.000, mientras que a pesar de que Netflix había anunciado para este año un presupuesto de $8 mil millones éste aumentó, llegando a estimaciones entre $12 y $13 millones en producción de contenido durante 2018.
Alex DeGroote, dueño de la compañía asegura que “la ITV es brillante, pero funciona con recursos limitados". Por otra parte, la difusión de contenido promocional gratuito a través de los canales de televisión, especialmente en los públicos, o nacionales, les hace perder tiempo y dinero.
Las transmisiones de televisión paga se ven interrumpidas también por la publicidad paga, cosa que no sucede en las plataformas de streaming, en las que se pueden ver todos los capítulos de las temporadas de las series, películas, cortos o documentales sin interrupciones, de ser el gusto del cliente.
Todos estos factores, hacen que se vea con preocupación un futuro poco prometedor para la televisión lineal, tv paga, satelital, o cableada, y es que, quizá a medida que sigan avanzando las inversiones, creaciones, innovaciones y formas de hacer contenidos de las plataformas de streaming, podrían quedarse atrás.
El gran reto de quienes aún creen y apuestan por mantener el negocio en pie es adaptarse y acoplarse a las necesidades de los diferentes tipos de audiencia, que aún siguen siendo consumidores de la ITV, y hacer que las estadísticas empiecen a progresar o al menos se mantengan, y captar sus necesidades para que sean resueltas con contenidos innovadores y creativos que estos se merecen.
Independientemente de los dispositivos por el que la audiencia decida ver sus contenidos de entretenimiento, igual seguirá siendo televisión pero adaptada a otras plataformas, y formas de ser y hacer contenido.
Para el año 2015, unos 19 expertos en materia de televisión interactiva hicieron un análisis, del cual concluyeron que la televisión se mantendrá a lo largo del tiempo sí y solo sí logra cumplir el gran reto de adaptarse a la creación de contenidos multiplataforma. Ya hoy es un hecho que las grandes cadenas de televisión difunden sus contenidos a través de televisión e Internet.
Lo que antes era un consumo restringido al hogar, se convirtió en un consumo “para llevar”, ya que estas plataformas proporcionan la libertad de poder trasladar los contenidos, a donde quiera que vayan los usuarios.
Mariola Cubells analista de televisión en la Cadena SER, dijo justamente para ese reportaje que “es verdad que ahora la tele se ve en otros soportes. Ahora podemos ver programaciones en diferido, o en nuestro Smartphone ¡Qué maravilla!”
Disminución de visualización de tv en vivo, ganancia para la tv conectada
Por otra parte, nuevos datos de Nielsen muestran que el uso tradicional de la televisión continúa en constante declive. También muestra que la televisión conectada está recuperando gran parte de las pérdidas de la televisión en vivo.
Nielsen apunta a que el adulto promedio vio 29 horas y 12 minutos de televisión en vivo por semana (4 horas y 10 minutos por día) en el primer trimestre de 2018. La visualización ha disminuido en un 4% desde el primer trimestre de 2017 y un 8% desde el primer trimestre de 2016.
La visualización de turnos de tiempo, principalmente a través de un DVR (Digital Video Recorder o PVR, Personal Video Recorder), el dispositivo de grabación de video en formato digital, compensó algunas de las pérdidas de la televisión en vivo. Los datos de Nielsen se promedian sobre todos los adultos que tengan o no la tecnología. La diferencia entre los usuarios de TV tradicional y el promedio no es grande (2%). Sin embargo, para otros dispositivos menos adoptados, la diferencia es mucho mayor. Los DVR están en aproximadamente la mitad de los hogares de los Estados Unidos. El usuario promedio de DVR ve casi una hora por día de TV, frente a 36 minutos por día para un adulto promedio.
Streaming continúa creciendo
De acuerdo con los datos arrojados por el estudio de Nielsen, en los últimos dos años, gran parte del tiempo perdido en la televisión se ha transferido al reproductor multimedia de transmisión. El adulto promedio vio 3 horas por semana en dispositivos como Roku y Apple TV en el primer trimestre de 2018. El uso ha aumentado en un 96% desde el primer trimestre de 2016, 1 hora y 29 minutos por semana. La televisión tradicional perdió 2 horas por semana durante el mismo período.
Nielsen dice que los reproductores de medios de transmisión alcanzan el 36% de la población de los Estados Unidos (EEUU). El usuario promedio del reproductor multimedia de transmisión en tiempo real, ve videos con su dispositivo durante 8 horas por semana (1 hora y 8 minutos al día). Roku informa que el uso de transmisión promedio diario para cada uno de sus 20 millones de usuarios activos, es de 2 horas y 40 minutos.
Los smartphone también compiten
Nielsen no mide la transmisión de video en teléfonos inteligentes directamente. Supervisa el tiempo empleado en aplicaciones cuya función principal es la transmisión de video. La compañía cuenta la actividad de Netflix y YouTube en este total, pero no la actividad de Facebook y WSJ (Wall Street Journal). Sin embargo, los datos son útiles para evaluar el aumento de la actividad de video.
Un adulto promedio pasó 1 hora 7 minutos por semana en aplicaciones de video durante el primer trimestre de 2018, un aumento de 43% año tras año y un aumento del 191% con respecto al primer trimestre de 2016. Las personas de 18 a 34 años son las que más usan el teléfono inteligente para video. La persona promedio en ese rango de edad pasó 1 hora y 45 minutos por semana usando las aplicaciones en el primer trimestre de 2018.
Nielsen dice que el 58% de la población adulta usa aplicaciones de video para teléfonos inteligentes y que el usuario promedio pasa 1 hora 56 minutos en las aplicaciones, por semana.
Los datos de Nielsen muestran que el adulto promedio en EEUU, está viendo un 8% menos de televisión en vivo que hace dos años. La mayoría de las pérdidas de visualización para TV tradicional se transfieren directamente a la TV conectada.
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